El secreto de poder recorrer un maratón o llegar a la cima de una montaña es concentrarse en recorrer o subir distancias cortas, disfrutar la experiencia de cada paso que doy en dirección a la meta y de cada escalón que subo en dirección a la cima.
Como dice mi abuelito:
“Ahí vamos al pasito, al pasito, mijo,
más vale paso que dure y no trote que canse”.
Abuelo Gilberto Ramírez